jorge viejo

Crowded House era el grupo de los hermanos Finn. Australianos, en España fueron muy populares a principios de los 90, con un pop sencillo pero muy trabajado, muy cuidado. Su mezcla de guitarras eléctricas y acústicas estaba muy conseguida. Recuerdo un concierto en el año 95, en una pequeña sala de Madrid, en la que repartieron porciones de sandía entre el escaso público. Siempre amables, sonriendo, con una actitud que no reconoceríamos en una estrella pop de la actualidad. Su mayor éxito fue “Weather with you”, con una estribillo simple, que todos hemos cantado en alguna ocasión.   

 

El estribillo  decía “Allá donde vayas, lleva el tiempo contigo.”  No importa que llueva, que nieve, que truene, que el viento se lleve todos los pensamientos. Lleva tu propio sol contigo, no dejes que nadie te quite tu sonrisa. Tú decides si quieres que todo lo exterior afecte en tu vida, tú decides si quieres que tu sol  luzca cada mañana sobre tu vida. Puedes elegir cantar crowded house…  O no.

La imagen que todos tenemos en la cabeza de un pirata es con un parche en el ojo. El cine ha aprovechado esta característica para darle al personaje un aspecto más fiero, más oscuro en las películas del género. Sin embargo, ese trozo de tela con una tira tenía un propósito mucho más importante.

En los navíos en los que navegaban se encontraban con un problema, puesto que la luz que inundaba la cubierta a pleno día contrastaba fuertemente con la oscuridad de las bodegas, en la que apenas había iluminación. Al entrar en la bodega los piratas necesitaban un tiempo para adaptar su visión a la nueva situación. Este tiempo era además importantísimo cuando abordaban algún otro navío, puesto que los abordados se aprovechaban de la situación atrincherándose en las bodegas para defenderse.

Un trozo de tela cambió la situación. Al tapar uno de sus ojos, conseguían que éste se acostumbrara a la oscuridad, y cuando tenían que entrar en las bodegas de los navíos cambiaban el parche de ojo, tapando aquel que estaba acostumbrado a la luz. De esta manera tenían un ojo adaptado a cada ambiente de luz.

La adaptación al medio puede ayudarnos al éxito. Y a veces esta adaptación al cambio proviene de un cambio pequeño, sencillo, sin tener la necesidad de cambiar el mundo. Y tú? Tienes ejemplos de pequeños adaptaciones que cambiaron tu mundo?

Steven Spielberg siempre ha incluido familias rotas en sus películas, quizá por la importancia que para él tiene esta institución. Y La lista de Schindler no fue una excepción, rompiéndose el matrimonio del protagonista, y también la “familia” judía. Hay una escena especialmente interesante de esta película, ya en el tramo final, que me gustaría comentar y conocer vuestra opinión. Schindler se lamenta amargamente, triste como no se le había visto hasta entonces, de que podría haber salvado a más prisioneros judíos. “Por este anillo, uno más”, se lamenta. Parece decir: “Si solo hubiera empezado antes, si solo lo hubiera hecho con más ganas…” El profundo lamento del protagonista es el de no haber aprovechado las oportunidades existentes. Igual que, salvando las distancias, sucede en estos días, en el final del verano. Ese último baño en el mar, ese último paseo matutino, ese último madrugón para aprovechar la jornada. Echar la vista atrás nos convence de que no hemos sabido dar todo lo que tenemos dentro, de que no hemos aprovechado todas nuestras oportunidades. ¿No sería perfecto poder mirar atrás y saber qué hiciste todo lo que pudiste? ¿Qué nos impide no aprovechar todas las oportunidades? ¿Qué te impide a ti aprovechar todas tus oportunidades?

En Reino Unido llevan varios días de disturbios en las ciudades más importantes. Londres está siendo el centro de los mismos, con edificios ardiendo y con comercios saqueados. Se comenta que son los incidentes más graves desde los años 80! En esta situación, un grupo de vecinos ha decidió actuar, y bajo el hastag #riotcleanup (limpia los disturbios) en twitter se han organizado para tratar de dejar la ciudad como antes de los disturbios. Armados de escobas, fregonas, cubos y bolsas de basura, se dedican a poner en orden de nuevo la ciudad. Un ejemplo de que las nuevas tecnologías solo son un medio, que lo verdaderamente importante se encuentra en nuestro motivos, en nuestras acciones. No hay confrontación, no hay venganza, no hay solicitud de justicia… solo hay escobas y el deseo de cuidar del entorno de todos. Para más información, pincha aqui

Ya sé que pensareis que solo hablo de libros, pero el ejemplo de Claudio bien merece una entrada. Hace unos meses se publicó 9 maneras de triunfar, un libro que condensa las entrevistas que hizo Claudio Novoa a algunos de los más insignes emprendedores de este país. En él, con pluma ágil, se muestran las aventuras de 9 personas para poner en marcha su visión de empresa, el ideal que tenían en la cabeza. Muestran los problemas que han tenido que superar, las adaptaciones que han tenido que llevar a cabo, el éxito que finalmente han conseguido, montando empresas tan exitosas como Imaginarium o MRW. Claudio nos muestra que cualquier camino puede llevar al éxito, siempre que se tenga fe en que el objetivo merece la pena cualquier esfuerzo.

Un ejemplo empresarial que fácilmente es extrapolable a la vida. Y es que cada uno de nosotros debe seguir nuestro propio camino, solo fijándonos en los demás para aprender, sin necesidad de adquirir los objetivos o las caminos de los demás. De esa manera, el éxito se convierte en algo aún más grande, en la consecución de los objetivos propios.

Si queréis saber más…

Jonathan Safran Foer es un gran novelista, un tipo original, serio, sesudo. Tiene dos novelas realmente diferentes, “Todo está iluminado” y “Tan fuerte, tan cerca”. Y acaban de publicar en España “Comer animales”, un ensayo sobre lo que supone para él comer animales en su dieta habitual. Esta reflexión la hace al tener que plantearse dar de comer a su hijo recién nacido. ¿Debe eliminar de la dieta de su pequeño los animales, como en la propia? ¿Que supone comer animales?. Investiga sobre lo que suponen las granjas industriales, el trato a los animales, los mataderos, pero también sobre lo que supone comer en conjunción con otras personas, sobre sus recuerdos en torno a la comida, sus propias experiencias.

El tema es apasionante, pero destaca el libro sobre todo por lo que supone enfrentarse a algo sobre lo que los demás sabemos pero no queremos saber, sobre lo que corremos una suave cortina. Destaca su valentía por enfrentarse a la realidad, investigar, por traer al consciente lo que le intriga, por no dejarse llevar por las dificultades que supondría enfrentarse a una creencia.

No evitamos saber sobre algún asunto, por miedo a la conclusión a la que podemos llegar? Safran Foer nos da un ejemplo para nuestro día a día.

Y.. por cierto, os recomiendo el libro! Que está fenomenalmente escrito!!

Hace un par de semanas tuve la suerte de dar un pequeño módulo de coaching en el MeDIP, el Master de Dirección Integrada de Proyectos, en la Escuela de Arquitectura de la UPM en Madrid. Quisiera aprovechar para dar las gracias a todos los alumnos, que aguantaron mis expliaciones y chistes malos. Espero que al menos os hiciera tener curiosidad por el coaching, y por las aplicaciones que pueden tener en vuestra carrera profesional!. Gracias por participar siempre en el proceso de coaching que hicimos juntos! Un abrazo.

Que el mundo se divide en introvertidos y extravertidos, no es ninguna novedad. Lo que quizá no sepamos los introvertidos es que están sometidos a las ideas de los extravertidos, gracias a los medios de comunicación.

Cuando una cámara de televisión se acerca a un grupo por la calle para hacerles cualquier pregunta, siempre hay algunos que rehúye la cámara, y otros que se pegan por aparecer. Solo las opiniones de este último grupo, los extravertidos, son las que aparecerán en el reportaje. Solo los extravertidos acuden a los concursos de la tele o a sus tertulias, y es solo su imagen la que se muestra. Los extravertidos discuten ideas de extravertidos, que escuchan introvertidos y extravertidos. Los extravertidos dicen, los introvertidos se lo piensan.

Una idea con altavoz es el comienzo de una revolución. Una idea sin altavoz rebota en las paredes del cerebro de un introvertido.

Si eres introvertido… saca esa idea a pasear! Si eres extravertido… presta un rato tu altavoz!

El verdadero reto está en retarse.

Se ha realizado una investigación universitaria sobre las letras de las canciones pop de las últimas décadas, desde 1980 hasta 2007. El resultado nos da una tendencia clara. Las canciones pop ya no hablan de “nosotros”, solo de “mi”. Han desaparecido las referencias a los pronombres personales plurales (nuestro, nosotros), y aumentan considerablemente las referencias de la primera persona del singular (yo, mi, mío). Ahora triunfan las canciones narcisistas, que me hablen de mi, que consigan que todo gire en torno a mí.

Otra conclusión interesante que sale de este estudio es que el amor ha dejado de ser una constante en las canciones. El pop más exitoso ya no habla de compartir, de amar. Ahora triunfa hablar de odiar, de matar, de cualquier otro sentimiento negativo. Vende más una pistola que un abrazo. Y es que… ¿a quién se le ocurriría hablar de abrazos en una canción pop hoy en día?

Las canciones que se estudiaron en este periodo fueron las diez más exitosas de cada semana en Estados Unidos, que, con pocas excepciones locales, podemos decir que son las que triunfan en todo el mundo.

La música no es, desde luego, la que produce este efecto narcisista, solo refleja la realidad de la sociedad. Los autores escriben sobre sí mismos, y sus canciones son alabadas por todos nosotros, reconociendo el hecho de que somos nosotros mismos quienes nos importamos, de que preferimos que nos hablen de nosotros mismos, de nadie más.

Somos realmente así?

Y si es así… cuál será el siguiente paso?

Es fácil hablar de “la sociedad” como algo externo a nosotros mismos, pero tú y yo somos parte de esta sociedad. Y teniendo en cuenta que la sociedad es, según la RAE, “Agrupación natural o pactada de personas, que constituyen unidad distinta de cada uno de sus individuos, con el fin de cumplir, mediante la mutua cooperación, todos o alguno de los fines de la vida”, significa eso que el fin de nuestra vida se circunscribe exclusivamente a nuestro cuerpo, a nuestra mente? Significa esto que los demás solo están aquí para que yo los utilice para cumplir mi fin en la vida?

Es esta la sociedad que tenemos, pero.. es esta la que queremos?